La profesión de Arquitecto/a Técnico/a tiene, actualmente, el carácter de profesión regulada, de acuerdo con el vigente ordenamiento jurídico español. Si bien, su origen histórico se remonta varios siglos atrás, ya que confluyen en ella las funciones de los antiguamente denominados «Aparejadores», cuya presencia activa en las obras de edificación está ampliamente documentada.
Se recogen referencias inequívocas a la profesión ya en el siglo XV; así, por ejemplo, en uno de los sepulcros de la Capilla de Santa Clara, de Tordesillas (1430) se puede leer la siguiente inscripción: Aquí yace Guillen de Rohan, maestro de la Iglesia de León et Aparejador de esta capilla.
De las filas de los Aparejadores salieron los Maestros Mayores. Las intervenciones de ambos profesionales se encuentran en el origen de prácticamente toda la edificación de determinada entidad ejecutada en España hasta bien entrado el siglo XX, y continúa hasta el día de hoy, bajo la vigente denominación de la profesión de Arquitecto/a Técnica/a, siendo varias las titulaciones universitarias de Grado que habilitan legalmente para su ejercicio.